Cerezas y picotas, grandes aliadas de las dietas y del cerebro

 

Llega el verano y de su mano aparecen en nuestros mercados unos frutos rojizos de intenso color y de sabor algo ácido pero muy refrescante. Son las  cerezas y picotas. Muchas personas piensa que  cereza y picotas es el mismo fruto, pero esto no es así.  Las principales diferencias son que las cerezas se producen solamente en Extremadura, en la zona del Valle del Jerte y con denominación de origen. La picota es una cereza más pequeña, más dulce, con menos acidez y con la carne más tersa y firme que el resto que las cerezas. Una de las características mas fáciles para diferenciarlas es que la cereza tiene un pequeño rabito leñoso porque este, a diferencia de lo que ocurre con las picotas, no se queda en el árbol durante la recolección. 
 

Tanto cerezas como picotas tienen beneficios evidentes para la salud. Son frutos con alto contenido en agua, casi el 80% de su composición total, y tienen muy pocas calorías (alrededor de 70 kilocalorías por cada 100 gramos). En cuanto a los nutrientes que contienen, unos 22 gramos por cada 100 gramos consisten en hidratos de carbono. Contienen también fibra (3%) por lo que pueden tener un pequeño efecto como laxantes. Es importante saber que prácticamente no contienen grasa. 
 

 

En cuanto al contenido de componentes de picotas y cerezas es importante conocer que ambas contienen melatonina. En este caso, las picotas tienen cierta cantidad mayor de melatonina que las cerezas. La melatonina es una sustancia que entre otras muchas funciones se considera que hace las veces de reloj biológico. La melatonina produce sueño pero además tiene efectos antioxidantes muy interesantes para proteger el organismo en general, pero sobre todo para el cerebro, los vasos sanguíneos y también la piel. También la melatonina potencia el sistema inmunológico
 

Otro efecto importante beneficioso de cerezas y picotas es que son muy beneficiosas para prevenir la anemia. Esta propiedad se ha atribuido a su alto contenido en minerales como hierro, potasio y sodio y en oligoelementos como zinc o manganeso. También tienen efectos beneficiosos sobre las vías urinarias. 
 

Las picotas y cerezas tienen un elevado contenido en polifenoles y antocininas. Las antocianinas para explicarlo de forma sencilla es el pigmento que proporciona a picotas y cerezas ese color rojizo. Pero lo importante desde el punto de la vista de la salud es que a través del efecto antioxidantes de las antocianinas a estas se les ha atribuido efectos antitumorales, antidiabéticas o antiinflamatorios entre otros. También se las ha atribuido efectos inhibitorios contra la actividad de las plaquetas. Si recuerdan por otros artículos de esta serie en Teinteresa, las plaquetas son las células que forman los trombos en el interior de las arterias y provocan procesos isquémicos como el infarto de miocardio. Pero hay un efecto muy interesante de las antocianinas y es el poder que tienen de eliminar ácido úrico, acido que interviene en el proceso de la gota. 
 

La gota es una enfermedad realmente muy dolorosa que ocurre por la acumulación de cristales de ácido úrico en las articulaciones
 

Dice la historia que Carlos I de España y V de Alemania sufrió una intensa artritis que le produzco grandes dolores de gota en su retiro en Yuste. Carlos I desoyendo los consejos de sus médicos, comía elevadas cantidades de carne, fuente importante de ácido úrico. Pero la gota no solo afectó a Carlos I. Enrique VIII (1491-1547), rey de Inglaterra también sufrió gota o al propio hijo de Carlos I, Felipe II, que le tuvo postrado en la cama en el Monasterio de Escorial
 

Dice una leyenda que los cerezos fueron llevado al Valle de Jerte por un Zar ruso. El Zar quiso que su esposa no tuviera añoranzas de la nieve y quiso  que las flores de los cerezos que siguen tapizando cada año este maravillosos valle simularan la nieve de las lejanas tierras Rusas.